El verano suele ser la época más calurosa del año pero, por supuesto, dependiendo de la zona puede ser un calor más o menos soportable o un calor insufrible. Incluso en el mismo país la localización es importante para pasar un verano más o menos agradable o un verano terrible. Generalmente tiene mucha relación con la humedad, incluso más que la propia temperatura. 35 grados pueden ser mejor soportables que 30 grados, si la humedad en el ambiente es menor. Pero, ¿por qué ocurre esto?
Lo primero para comprender cómo funciona la sensación de calor de nuestro cuerpo, debemos explicar que una de las primeras cosas que suceden cuando tenemos mucha calor es que empezamos a sudar. El sudor no es más que una defensa de nuestro cuerpo: al notar el sobrecalentamiento este empieza a sudar para enfriarse. Se trata de nuestro "climatizador" natural, el agua recorre nuestro cuerpo y luego se evapora. La humedad en el ambiente altera este comportamiento del cuerpo, por ello cuando la zona es muy húmeda sufriremos más los efectos de las altas temperaturas.
Así es cómo la humedad afecta a nuestro cuerpo
Si existe mucha humedad en el ambiente el proceso de evaporación del sudor en nuestra piel se resiente, en concreto se ralentiza, lo que provoca que el cuerpo no se refrigere naturalmente de forma correcta y tendemos a empapar mucho más la ropa. El sudor se acumula en nuestra piel, en nuestra ropa, y finalmente termina por desaparecer el efecto de refresco que debería generarle al cuerpo.
Es por el efecto de la humedad que notamos cómo el aire de un ventilador nos refresca. Aunque un ventilador común no tenga frigorías y por lo tanto no enfría el aire ni un solo grado, lo cierto es que el aire que arrastra con sus palas suele llegarnos con menos humedad, motivo por el que la sensación de nuestro cuerpo es de frescura, aunque realmente la temperatura del aire sea la misma. Lo que sucede es que el nuevo aire sí admite la evaporación de nuestro sudor.
Por otra parte, cuando hace mucho calor y una tasa de humedad relativa alta, se recomienda también permanecer en la sombra. En este caso la humedad no cambia, pero sí es cierto que la sombra puede protegernos de hasta 15 grados menos de temperatura.
En espacios abiertos no podemos controlar la humedad. Pero sí dentro de los ambientes de nuestra casa. Si mantenemos el interior libre de humedad vamos a tener una vida más placentera y saludable.
Link: https://ecodiario.eleconomista.es/viralplus/noticias/10039981/08/19/Por-que-con-la-humedad-aumenta-la-sensacion-de-calor-Esta-tabla-tiene-la-respuesta.html
Escribir comentario
Sergio Omegna (lunes, 18 diciembre 2023 06:36)
Si hacen presupuestos